La historia de una leyenda Geselina del Rock Nacional.
“Convengamos que siempre queda muy bien andar por ahí diciendo YO NACÍ EN VILLA GESELL” cuenta el prolífico músico desde su libro autobiográfico, "Memorias improbables", refiriéndose a un artilugio que solía usar para seducir chicas.
El querido y talentoso músico Willy Crook, es un hijo directo de Villa Gesell.
“Nunca había pensado en cómo Gesell marcó mi personalidad. Quizás en el gusto por los lugares agrestes, que sigo cultivando. Pero también en el hecho de arreglártelas solo, andar solo por la vida. Creo que tiene que ver con eso, pues todo quedaba lejos y todo lo hacía solo”.
Eduardo Guillermo Crook Pantano, tal su nombre completo, nació en agosto de 1965. Aquí vivió junto a sus padres hasta que la familia decidió emigrar a España dónde se establecieron por unos años, aunque Willy se trasladaba a distintos países europeos. La familia retorna a Gesell, a fines de 1982 debido a una oportunidad laboral de su padre. En ese retorno conoce en un balneario a unos particulares personajes que tocaban una música muy especial, con un líder más particular aún, llamado Luca Prodan. Entabla una relación amistosa con ellos y después vendría otra historia vinculada con los "Sumo".
Años más tarde volvería él solo a Europa, plantándose y haciéndole frente al desafío de una verdadera aventura vital, en amplios sentidos.
Cuenta en su haber con una prolífica y jerarquizada carrera artística.
Con apenas 18 años integra nada menos, la mítica banda “Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota” como saxofonista, marcando un hito histórico por lo que la banda representa, y por el particular aporte que él realiza con un más que reconocible estilo propio; grabando junto a ellos los discos “Gulp!” y “Octubre”.
Tiene también una cercana vinculación con Luca Prodan, con quien estuvo en Villa Gesell y en la ciudad de Buenos Aires, puesto que Luca le había propuesto integrar la banda en una aparente voluntad de reemplazo de Pettinatto que en verdad, nunca existió.
Es luego integrante de Los Abuelos de la Nada y frecuentemente invitado por distintos artistas y bandas.
Entre su vasta y riquísima trayectoria, de la cual su destaca una apabullante y talentosa versatilidad se registra su paso que va desde una inusual incorporación de saxo a una banda de heavy metal argentino, como lo fue Riff, liderado por Pappo, circunstancia que quedó registrada en aquel Paladium del '86, con disco grabado incluído. De la misma forma que podía lucirse en el rock pesado local, era totalmente capaz de acompañar con el mismo instrumento, a los modernos "Los Encargados".
Nuevamente su espíritu lejano a la comodidad lo lleva otra vez a España.
Allí trabajó como empleado en una casa fúnebre, de mecánico, pintor, camarero plomero, y de DJ.
Este último trabajo es fundamental para su carrera y lo llevó incorporado por siempre. Esa nueva faceta le permite adentrarse y profundizar en artistas como Jamiroquai y le abre las puertas del conocimiento acabado sobre la obra de James Brown, consustanciándose con su estilo pero traduciéndolo a su propio sello y marca.
En esas circunstancias es que ocurre otra vuelta más que lo lleva a otro camino, al ser convocado a integrar "Lions in Love" junto al argentino Daniel Melingo y Guillermo Piccolini, rodando con ellos desde 1989 hasta 1993.
En su regreso a Argentina toca con Alejandro Medina y con el mítico violinista Jorge Pinchevsky. Es invitado a tocar con Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota durante 3 shows en Obras, en el Patinódromo de Mar del Plata y en el estadio de Huracán.
Charly García lo invita a participar en su histórico recital en el estadio de Ferro.
Toca en vivo y graba con Los Fabulosos Cadillacs.
También con Fontova, Memphis, Man Ray, Andrés Calamaro y hasta con "La Mona" Jiménez. Podia deslizarse con el mismo talento y pasión por el rock, el tecno, el pop, la salsa y el cuarteto.
En 1995 lanza su primer disco de material propio llamado “Big Bombo Mamma” y más tarde llega la primer placa de su grupo “Willy Crook & Funky Torinos”, con quienes grabaría nada .menos que 11 discos, en el cual afirma su exquisito estilo musical que lo ubica como un brillante referente del funk; con fuertes vínculos con el soul, el rithym and blues y el Acid Jazz.
Al respecto del comienzo con los Funky Torinos, que tuvo alguna variación en sus integrantes, y abordando también el hecho de querer hacer un camino distinto y propio, cargando con la huella indeleble de haber sido " Un Redondito" durante cuatro años, el músico describía y explicaba; “Se fue armando el asunto, les gustaba mi música y yo estaba enloquecido de amor con estos cretinos. Es fabuloso y reconfortante hacer música con estos criminales. Unos muchachos competentes. No había desperdicio. Cuando tomé ese camino junto a los Funky Torinos, sabía que me enfrentaba a que hicieran una feta de Patricio Rey. Y me valió esa palabra de cuatro letras (risas). Pensé que iba a morir con una P clavada en la frente. Pero no había ni hay una posibilidad de que haga algo con eso. Aparte que esta es la música que quiero oír. Y pensaba que era una música que necesitaba que se la refresque. No medí el riesgo de ser ignorado. Lo que yo veía era que la gente con la que tocaba era admirable, mal. Y pensaba: si a estos tipos les gusta, vamos para adelante"
Willy no solo aceptaba los desafíos, sino que iba en búsqueda de ellos.
El arte, en su expresión musical, no era una parte divisible de su persona; significaba simplemente ÉL MISMO, con coherencia y búsqueda, y con esa extraordinaria convicción que sólo exponen los grandes artistas.Y esa característica se exponía en el sentido artístico y en el personal.
Resulta más que conveniente y preciso, al intentar describir cabalmente su personalidad artística y personal, recurrir a sus propias palabras, cargadas siempre de un fino humor, ironía y una ácida lucidez. "Estuve muy contento con lo que hice. Siempre hice lo que yo escucharía. Nunca hice otra cosa. No es muy difícil hacer un hit. Sobre todo habidas cuentas de que muchos hits se parecen uno al otro. El tema es quién querés ser. Lo mismo que Patricio Rey. Escucho los solos que ejecutaba con ellos y digo: joder, no sé si ahora toco así de bien. La música es la única que quiero que me diga que gusta de mí".
Cuando se refería al género musical del cual fue el mayor exponente argentino, solía decir;
"El funk es un primo cretino del rock que no va a los entierros ni a las enfermedades: va cuando hay joda nada más", o
“El funky es el primo canchero del rock”
El saxofonista, guitarrista, bajista, vocalista y compositor, es profundamente querido, admirado y respetado por todo el espectro de exponentes de la música nacional y de buena parte de la música mundial, dando cuenta de ello las varias invitaciones recibidas para telonear a artistas tales como David Bowie y nada menos que al rey del funk, James Brown.
El querido y talentoso artista geselino, fallece el 27 de junio de 2021, luego de sufrir un ACV, a los jóvenes 55 años, conmoviendo profundamente, no sólo a esta ciudad que lo vió crecer, sino al país entero.
Cientos de artistas sienten el golpe duro, dando testimonio de su talento, su filoso humor, su nobleza, su enriquecido intelecto y su maravillosa esencia humana.
No hace falta indagar mucho en sus amigos de la infancia, de la adolescencia, en sus compañeros de aventuras, en sus maestras y maestros, en sus colegas y en cuanta persona haya sido cercana a él, para darse cuenta de tan talentoso artista y especial ser humano que, por otra parte, ha vivido intensamente, múltiples experiencias vitales, plagadas de desafíos y siempre con la férrea convicción de ser músico, ser artista, a como dé lugar.
Su arte permanecerá por siempre y su recuerdo anidará profundamente en nuestros corazones.